viernes, 28 de octubre de 2011

Una visita de lo más deportiva.

   Este año, la ya clásica y siempre bienvenida visita anual de mi hermano Migue, se produjo en el puente del Pilar, aunque yo se que a él le hubiese gustado venir en otras fechas (Fallas o en verano), pero esta vez no ha podido ser. Pero bueno, a mi personalmente me da lo mismo cuando venga, pues siempre es un placer y una alegría el tenerlo por aquí unos días, aunque a veces no lo aguante ni la madre que lo parió, que es también la mía.
   Esta vez aprovechamos para visitar Port-Saplaya, una urbanización muy bonita donde no hay dos viviendas iguales y en la cual puedes llegar con tu barquito justo hasta la puerta de tu casa. Allí pasamos una agradable mañana y almorzamos por los alrededores. También estuvimos, como no, en el pueblo (Sot de Chera) donde celebramos el 2º concurso particular de tiro con espopetilla de plomillos. Este año no hubo ganadores ni vencidos, pues simplemente practicamos un poco la puntería.
   Donde si hubo ganador fue el día que fuimos a jugar al tenis, mi hermano, mi cuñado Julián y yo, pues mi hermanito nos metió una soberana paliza a ambos, aunque para ganarnos a nosotros no hace falta ser ningún Rafa Nadal, jejeje. Pero también tengo que decir que un par de días salimos a hacer un poquito de footing y en esta disciplina fui yo quién se llevó el gato al agua.
   En fin, que pasamos unos días entretenidos, como veis casi todos ellos haciendo deporte, que pena que no nos podamos ver mucho más a menudo, porque es a mi hermano Migue a la persona (junto con mi Madre) a la que más hecho de menos desde que vivo en Valencia.
   Bueno ya pronto, estas Navidades en Sevilla, nos volveremos a ver, y esta vez seré yo el que esté de vacaciones...que ganas tengo ya de que llegue ese día.

Un abrazo a todos y en especial para mi hermano Migue.
Fran.   

miércoles, 12 de octubre de 2011

¿Porqué a los Sevillistas en Sevilla se les llama "Palanganas"?

   Mi gran amigo Carlos Mavillard, me ha mandado a través de un oyente del programa Estilo Betis (90.4 FM Sevilla), un curioso documento, en el que se explica el origen del porqué a los sevillistas en Sevilla se les llama "Palanganas". Después de leerlo que cada cual saque sus propia conclusiones. Habrá quién esté orgulloso de ser sevillista y habrá quién esté orgulloso de ser bético. Dice así:

   Corría en año 1931. Por aquél entonces mi padre, Félix Medina Mancera, tendría apenas 13 añitos de edad y era aprendiz de  peluquero en la calle Barcelona, de nuestra hermosa ciudad de Sevilla , arreglando las barbas y barriendo los pelos que los maestros peluqueros cortaban a sus clientes.
   Un día en dicha peluquería, un cliente, viejo directivo fundador del Sevilla F.C. en el año 1905,  les contó mientras le cortaban el pelo, que en 1907 un grupo de directivos del Sevilla ficharon a un prometedor jugador de la ciudad, pero hijo de un humilde trabajador y por tanto sin el "necesario" pasaporte clasista para pertenecer por aquel entonces a tan noble y capitalista Club. 
   Hubo algunos directivos que no estaban de acuerdo con esta postura, pues pensaban que todos los sevillanos sin excepción, deberían  tener la oportunidad de pertenecer a este club, sin importar la clase social a la que uno perteneciese.
   Las discusiones fueron tan fuertes que la mitad de los directivos cesaron en su cargo como miembros del Sevilla, F.C. y crearon ese mismo año el Betis, C.F.
   Este grupo de ex-sevillistas visitaron a sus antiguos compañeros para informarles de que abandonaban el club, fundaban otro nuevo y como símbolo de la desunión de ambas directivas les llevaron un presente. Los sevillistas al abrir el regalo, vieron que este se trataba de una Palangana completamente blanca, de cerámica Trianera, en la cuál había una nota que decía:
   "Aquí os dejamos como despedida esta palangana, que la utilizaréis de por vida para recoger las lágrimas que derramareis, no por vuestros fracasos, sino por nuestros éxitos, pues a partir de ahora estaréis mas pendientes de ellos que de vuestra propia realidad".

  Dedicado con todo mi cariño para los muchos amigos y familiares Sevillistas que tengo y que gracias a Dios no se parecen en nada a los personajes de este antiguo y singular relato.
Fran.

miércoles, 5 de octubre de 2011

Nos vemos en Sevilla...

   Una despedida en la estación, es una de esas cosas que a mí al menos me hacen sentir muy triste. Cuando ves alejarse a la persona querida,  dejas de ser la misma persona y pasas a convertirte al momento en otra persona distinta, una persona a la cual le falta algo... y no puedes hacer nada por evitarlo.
   Llegamos como en otras ocasiones, muy temprano a la Estació del Nord. La mañana invitaba a un sin fin de planes, cualquiera de ellos mejor, que el ir a despedir a mi Madre al pie del andén.
   Había venido a pasar unos días con nosotros a Valencia, pero ya regresaba a su querida Sevilla. No me puedo ni imaginar lo que iría pensando durante el viaje de vuelta. Supongo, que tendría los sentimientos enfrentados en el corazón. Y es que despedirse de una Madre por un largo tiempo, es algo muy triste, pero despedirse de un Hijo, lo es aún más.
   Ya solo nos queda esperar a la próxima vez, que será "solo" dentro de 3 meses... mientras tanto seguiremos disfrutando de todo lo demás y la próxima vez que nos veamos, que será en Sevilla, volveré a tener por unos días, esa parte de mi que ella se llevó en el tren.
  Un beso Mamá. Te quiero.
Fran.