Montando la puerta de mi Cuñaos.

  Aquí me tenéis este fin de semana pasado, en plena faena montándole una puerta a mis cuñaos en su nueva casa, para que los perritos no se les escapen, sobre todo el salchicha "Lolo" que es un poco sinvergüenza y a la mínima oportunidad que se le presenta se fuga el tío a darse una vueltecita por la urbanización.
 Ellos para esto del bricolaje son un poco "negados" y lo único que saben hacer bien es mandar, eso sí, para eso son los números uno. Hacer paellas también se les dá bastante bien...y esta es la paellita de marisco que se curraron el sábado para invitarnos a "pasar" el día.

 Que rica le salió a mi cuñao, que fue quién la hizo. Los dos tienen mucha práctica ya en esto de hacer paellas y la verdad es que las bordan! Después seguí con el trabajo y este fué el espectacular resultado final de la puerta ya terminada.

  Los "clientes" quedaron muy satisfechos con el trabajo, (no es para menos, no es por nada) y lo celebramos con unos Daikiris made in Valencia.

  Ya por último, para quedarnos fresquitos y bien descansaditos...de cabeza a la piscina, hacer un poco el "cabra" y mojarnos un poquito también por fuera, porque no veas como pegaba la calor!

  Un jornada muy agradable la que pasamos. Los niños se divirtieron mucho y todos estuvimos muy entretenidos, sobre todo yo... que me llevé casi todo el día con el montaje de la puertecita. 

  Pero bueno, por las risas que nos echamos, los Daikiris que nos tomamos y  por La Paellita que nos metimos,  mereció la pena. 

  Y sobre todo por la satisfacción del trabajo bien hecho.

Buen verano a todos,

Fran.